Resultado del neoliberalismo, el contraste entre pobreza y opulencia en América Latina es insultante, afirmó Raúl Castro

50 aniversario de la llegada
del Granma a Cuba, el 2 de diciembre

de 1956, inicio de la revolución cubana.

El modelo económico neoliberal impuesto en América Latina ha provocado que el contraste entre opulencia y pobreza sea insultante y oprobiosa, denunció el presidente interino de Cuba, Raúl Castro Ruz, durante la celebración del aniversario 50 del desembarco de la expedición revolucionaria del Granma en Cuba, encabezada por Fidel Castro, el 2 de diciembre de 1956, fecha en la que se inició la gesta libertaria cubana que culminó derrotando a la dictadura el 1 de enero de 1959.

Por ello, agregó, “Los pueblos latinoamericanos, de manera progresiva en los últimos tiempos, han expresado su indignación y repudio ante las políticas entreguistas y de subordinación al imperio de los gobiernos y partidos tradicionales”

“Los movimientos populares y revolucionarios se robustecen y a pesar de las multimillonarias campañas de desinformación, el chantaje y la injerencia descarada de Washington; nuevos y experimentados líderes asumen la conducción de sus naciones”, subrayó.

Raúl Castro, quien ocupa de forma interina la presidencia mientras Fidel Castro, su hermano, se recupera de una enfermedad que lo tiene en cama desde hace meses, explicó que la anexión económica de América Latina por parte de Estados Unidos a través del ALCA fue derrotada, y en su lugar surge para beneficio de las masas desposeídas el proyecto integrador de la Alternativa Bolivariana para las Américas, ALBA, propuesta por el Presidente Hugo Chávez.

Así mismo señaló que, a pesar de las maniobras y presiones de Estados Unidos, quien en “los últimos años ha desarrollado una escalada sin precedentes de hostilidad y agresividad contra Cuba con la esperanza de asfixiarla económicamente y derrocar a la Revolución mediante la intensificación de la labor subversiva”, Cuba se ha fortalecido, prueba de ello, dijo, fue la realización exitosa de la Conferencia Cumbre del Movimiento de Países No Alineados en La habana y el apoyo alcanzado en la Asamblea General de Naciones Unidas a la resolución de condena al bloqueo norteamericano contra nuestro país.

Comentó que, “a muchos les pareció que la caída del campo socialista y la desintegración de la Unión Soviética representaba la derrota definitiva del movimiento revolucionario internacional”, y que incluso, “algunos se aventuraron a sugerirnos el abandono de los ideales a los que generaciones enteras de cubanos habían dedicado sus vidas”, pero grande ha sido la sorpresa y la frustración para nuestros enemigos y mucho más grande la admiración de las mayorías oprimidas al presenciar el ejemplo de firmeza, ecuanimidad, madurez y confianza en sí mismo que ha dado nuestro pueblo, puntualizó el líder cubano.

Por otra parte, indicó que, “recientes acontecimientos en la arena internacional atestiguan el fracaso de las políticas aventureras de la actual administración norteamericana. El pueblo de ese país demostró en las urnas el pasado 7 de noviembre su rechazo al concepto estratégico de la guerra preventiva, el uso de la mentira para justificar intervenciones militares, la utilización del secuestro y las prisiones clandestinas, así como la despreciable legalización del empleo de métodos de tortura en la llamada guerra contra el terrorismo”.

“A tres años y siete meses de la eufórica y precipitada declaración de "misión cumplida" en Irak por parte del Presidente Bush, a bordo de un portaaviones, continúan llegando a Estados Unidos los cadáveres de jóvenes soldados norteamericanos, caídos en una guerra motivada por el dominio de los recursos energéticos de la región”.

“El gobierno de Estados Unidos, señaló, se encuentra ante una encrucijada sin salida: por una parte comprende que no puede prolongar la ocupación del país y al propio tiempo, admite que no tiene creadas las condiciones mínimas para abandonarlo dejando sus intereses asegurados, a la vez que crece indetenible la cifra de muertos y mutilados entre la población, sumida en una guerra civil como consecuencia de la anarquía y el desgobierno que generó la invasión norteamericana”.

“A los ojos de todo el mundo, la llamada "cruzada contra el terrorismo" se encamina inexorablemente a una derrota humillante”, sentenció Raúl Castro, al tiempo de que señaló: “el pueblo norteamericano, al igual que hizo en Vietnam, pondrá fin a estas guerras injustas y criminales.

“Esperamos, dijo, que las autoridades de los Estados Unidos aprendan la lección de que la guerra no es la solución a los crecientes problemas del planeta; que proclamar el derecho de atacar irresponsablemente a "sesenta o más oscuros rincones" del mundo, aún cuando ya están empantanados en dos de ellos, hace más complejas y profundas las diferencias con el resto de los países; que el poder basado en la intimidación y el terror no pasará nunca de ser una ilusión efímera y sus terribles consecuencias para los pueblos, incluyendo el norteamericano, están a la vista”.

Estamos convencidos, subrayó, de que la salida a los acuciantes conflictos que enfrenta la Humanidad no está en las guerras, sino en las soluciones políticas.

En el marco del 50 aniversario del desembarco revolucionario del Granma, acto en la que también se festejó el día de las Fuerzas Armas Revolucionarias de Cuba y el cumpleaños 80 de Fidel Castro, el presidente interino cubano declaró la disposición de resolver en la mesa de negociaciones el prolongado diferendo entre Estados Unidos y Cuba, pero aclaró que, “siempre que acepten, como ya dijimos en otra ocasión, nuestra condición de país que no tolera sombras a su independencia y sobre la base de los principios de igualdad, reciprocidad, no injerencia y respeto mutuo”.

Pero, advirtió, “preservaremos al precio que sea necesario la libertad del pueblo cubano y la independencia y soberanía de la Patria”, por lo que explicó que, mientras se impone el sentido común en la conducta de los círculos del poder en Washington, “proseguiremos consolidando la invulnerabilidad militar de la nación sobre la base de la concepción estratégica de la Guerra de Todo el Pueblo.

Discurso completo

Cuba camina hacia una nueva etapa de su historia

La ausencia de Fidel Castro en la conmemoración del 50 aniversario del desembarco del barco Granma en Cuba ha suscitado innumerables comentarios en todo el mundo. Pero más allá de la inasistencia del líder histórico de la Revolución, enfermo desde julio pasado, ha sido el discurso de Raúl Castro lo que ha hecho pensar que la isla se acerca a una nueva etapa de su historia. El presidente interino tocó temas cruciales en el futuro de Cuba, tal vez una señal de que está firme en el mando.

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